Vértebra Cultural “la columna”

Cultura ¿qué es y con qué se come?

Ever Rodas.

Cultura ¿Qué es y con qué se come? ¿Se ha puesto a pensar en la cultura? ¿Puede dar una idea clara de lo que es? ¿Cree que es importante? En el presente texto hago un recorrido por tres artículos de la constitución de la república de Guatemala, no sin antes pensar en la Cultura, palabra tan escurridiza, que puede ser muchas cosas a la vez, un término de múltiples caras o formas. No pretende ser un texto muy amplio. Con esto se amontonan más preguntas que respuestas.

ANTIBIOGRAFÍA

Coleccionista de historias, promotor de las artes no-objetuales. Investigador apasionado, me gustan los imposibles, porque los posibles ya fueron hechos. Soñador empedernido. Me gusta la cocina, crear lazos de colaboración, también salir a caminar sin rumbo fijo, algo callado, observador, un tanto serio. Me gusta la fotografía, el cine, una buena bailada y reír a carcajadas.

Cultura ¿qué es y con qué se come?

Palabra tan escurridiza, puede ser muchas cosas a la vez. Es una construcción social, es algo innato a un pueblo, está prácticamente en todos los aspectos de la vida, en muchos casos tenemos ciertas culturas dominantes, sean éstas religiosas y/o patriarcales que debemos superar.

Palabra tan escurridiza, puede ser muchas cosas a la vez. Es una construcción social, es algo innato a un pueblo, está prácticamente en todos los aspectos de la vida, en muchos casos tenemos ciertas culturas dominantes, sean éstas religiosas y/o patriarcales que debemos superar.

 

Es útil por ser una característica identitaria que se puede moldear o re-enfocar. Al ser algo que se puede aprender o desaprender y que puede ser inculcada, es ahí donde entendemos el poder que ella conlleva. A la cultura usualmente se le asocia con las expresiones tradicionales. Si partimos de todo esto, nos topamos con un término de múltiples caras o formas, vuelve a resonar el tema de este texto. En la constitución política de la república de Guatemala hay varios artículos dedicados a ella. Revisaré tres que me interesan para desarrollar.

 

Artículo 57. Derecho a la cultura. “Toda persona tiene derecho a participar libremente en la vida cultural y artística de la comunidad.[1] Si bien este artículo de la constitución política de la república de Guatemala es claro y concreto, en el derecho que toda persona adquiere desde su nacimiento, éste no tiene alcance, porque en la mayoría de los casos se desconoce su definición y su aplicación. Quienes deberían ejercer ese derecho conscientemente, terminan siendo manejados por la cultura hegemónica sin tener las herramientas para afrontar ese embate de elementos que influyen en la construcción del derecho a la cultura como la televisión y el internet.

 

Artículo 58. Identidad Cultural. “Se reconoce el derecho de las personas y de las comunidades a su identidad cultural de acuerdo a sus valores, su lengua y sus costumbres[2]”. Me surge una duda al respecto, ¿cuántas personas comprenden, o se les ha inculcado, la identidad cultural? Hablamos de un país con un alto grado de analfabetismo y mucha deserción escolar en las zonas rurales, con una de las tasas más bajas de inversión en educación. ¿Cómo se puede hacer valer este artículo de la constitución sin las herramientas mínimas, que incluye hacérselo llegar a toda la población? Aunque hay avances en temas de leyes y reconocimiento de los pueblos originarios, estos siguen siendo marginados, siguen con poco acceso a la educación, salud y a una vida digna, bajo amenaza de hidroeléctricas o la minería que contaminan y destruyen el ambiente. Sumado a esto, el dominio de la religión protestante evangélica, que resulta ser una de las más radicales e irrespetuosas del otro, ya que destruye todo a su paso (en cuanto a la identidad) estigmatizando todo lo que no esté dentro de su biblia, negando el conocimiento ancestral de los pueblos originarios, sin que se generen acciones concretas contra este enemigo de la identidad y las costumbres tradicionales.

 

Artículo 62. Protección al arte, folklore y artesanías tradicionales. “La expresión artística nacional, el arte popular, el folklore y las artesanías e industrias autóctonas, deben ser objeto de protección especial del Estado, con el fin de preservar su autenticidad[3] Este punto suena bonito porque el papel aguanta con todo, pero la realidad es otra. En el imaginario colectivo la labor del artista es mal vista. Se les ve como vagos o drogadictos, peor aún, se piensa que es un pasatiempo, y que por lo tanto no deberían cobrar por lo que hacen. Si bien no hay un gran mercado del arte en Guatemala, si hay algunas entidades privadas que a través de subastas organizan eventos con el supuesto de vender. Es el artista el que se lleva la peor parte, recibiendo la mitad del precio en el que circula la obra.

 

En estos tiempos de pandemia los fondos que surgieron para apoyar la labor de quienes nos dedicamos al arte o a la cultura fueron pocos, como Proyecto Ultravioleta (que funciona con fondos privados), y del Ministerio de Cultura y Deportes. Y por otro lado si contamos cuántas subastas o fondos de apoyo al arte se hacen anualmente en el país, veremos fácilmente que hay muchas entidades, que no van por el desarrollo, del arte, ni de los artistas, sino por el beneficio que ellos les generan.

 

Sí, en Guatemala sí hay escuelas de arte, centros culturales, casa de la cultura, pero se encuentran en precarias condiciones, con malos pagos para los que laboran en ellos (si es que llegan algún día a pagarles, o si no, es ad honorem). En el caso de docentes, otra realidad es que poseen poca experiencia como artistas, ni tienen la capacidad pedagógica para atender a estudiantes multiétnicos de un país como el nuestro, por ejemplo en la Escuela Nacional de Artes Plásticas (ENAP), varias generaciones de estudiantes han llevado y siguen llevando una lucha por que sus necesidades sean atendidas, denunciando abusos y acoso por directores o algunos docentes, pero siguen siendo ignorados hasta el día de hoy. Solo un ejemplo presente y pequeño de un sin número de casos algunos denunciados y otros, poco o nada conocidos.

 

Hay mucho por hacer. Se debe empezar por dignificar el trabajo del artista, del hacedor cultural y de las prácticas culturales, sumado a eso es momento de repensar el valor de la cultura para lograr cambios. El arte y la cultura en general seguirán su labor con poco o nada de recursos, creyendo firmemente en el campo de oportunidades que ellos representan para la construcción de un mejor país.

 

[1] Constitución política de la república de Guatemala Const. Art. 57, Guatemala. 1985 con reformas de nov. 1993.

[2] Constitución política de la república de Guatemala Const. Art. 57, Guatemala. 1985 con reformas de nov. 1993.

[3] Constitución política de la república de Guatemala Const. Art. 57, Guatemala. 1985 con reformas de nov. 1993.